Desde Salamanca su ciudad natal, hasta Marbella donde pasaba los veranos, Roberto Santamaría ha construido un camino marcado por la pasión por el emprendimiento. Aunque, como él mismo dice, de pequeño era un poco “trasto” y los estudios no eran su fuerte, tenía claro que su futuro estaba en los negocios. Hoy, tras ocho años de éxito, Grupo Mosh se ha consolidado como un referente del ocio marbellí con establecimientos icónicos como Mosh, Playa Padre, Momento, Nido Estepona, La Cabane y Motel Particulier.
¿Cómo nació su interés por el g
olf y desde cuando lo practica? ¿Tiene algún club favorito o le gusta probar en lugares nuevos?
Tuve la suerte de empezar a jugar al golf cuando apenas tenía siete años, ya que mis padres eran grandes aficionados. Siempre tengo unos maravillosos recuerdos del Club de Golf Zarapicos en Salamanca que es donde empecé a jugar y donde pasé grandes momentos de mi niñez.
En Marbella soy socio del Club de Golf Aloha, un gran club y un magnífico campo, siempre cuidado hasta el más mínimo detalle. Como todo aficionado a este deporte me gusta jugar diferentes campos y más viviendo en la Costa del Sol, que es un auténtico paraíso para los amantes del golf.
Marbella tiene muchos y buenos campos, ¿cómo ve a Marbella como destino de golf?
Marbella es mundialmente conocida por sus campos de golf, lo que, unido al excelente clima, permite la práctica de este deporte todo el año. Cada año vienen turistas de cualquier parte del mundo para jugar en Marbella y esto unido a la gran oferta gastronómica y hotelera que tiene la ciudad es una tendencia al alza. Es un auténtico lujo ser amante del golf y poder vivir en marbella.
¿Es verdad eso que dicen que se cierran muchos negocios jugando al golf?
Jugar al golf es una fuente increíble de contactos. Pasas 4 o 5 horas con una persona y al final de la partida en muchos casos parece que la conoces de toda la vida. En mi caso me ha ayudado mucho a la hora de relacionarme, sobre todo al principio cuando vine a Marbella, pero también con los clientes que a través del golf hoy en día son grandes amigos.
Grupo Mosh ya mostró su compromiso con este deporte a través de la iniciativa Golf Made Me Do It… ¿por qué se establece este vínculo y de qué manera?
Efectivamente hicimos un torneo benéfico hace un par de años y fue un éxito de participación y organización. El torneo se completó con una cena de gala y se recaudaron fondos para la organización benéfica Maiti Nepal. Tenemos muchos clientes golfistas y sabíamos la importancia para el grupo a la hora de realizar un torneo. Además, como grupo, tenemos un fuerte compromiso con el deporte, así que son acciones que seguiremos haciendo en un futuro próximo.
¿Qué grandes planes nos puedes contar de Grupo Mosh para este 2025?
De momento estamos involucrados de lleno en la apertura de nuestro próximo proyecto en Marbella, en el emblemático edificio Aresbank situado en plena milla de oro. Abrirá sus puertas dentro de poco y será un referente gastronómico y de ocio en la ciudad. Tenemos en mente también llevar nuestras marcas a otros destinos internacionales y es cuestión de tiempo que esto sea una realidad.
De todos los locales de Grupo Mosh, ¿cuál recomendarías a un golfista para disfrutar después de su ronda y por qué?
Tenemos la suerte de contar con conceptos muy diferentes y para todos los gustos, por lo que cada uno de ellos es claramente recomendable para los golfistas. Muchos de nuestros clientes terminan su ronda de golf y vienen a almorzar a Playa Padre en Marbella o a Nido Estepona. Para los que terminan de jugar tarde y salen a cenar directamente siempre elijen Mosh y Momento. ¡A los golfistas nos encanta divertirnos también!