La Costa del Sol es un paraíso por su clima, gastronomía y cultura, pero también por ser el destino predilecto por los aficionados al golf. Con más de 70 campos, que representan casi el 70% de los existentes en la comunidad autónoma, ostenta la mayor concentración de Europa Continental, ganándose así el merecido título de Costa del Golf, que abarca desde la Axarquía hasta Sotogrande.
La Costa del Sol está situada en una ubicación privilegiada junto al mar Mediterráneo. Esta cercanía al mar hace que se pueda disfrutar de una temperatura de 20 grados de media y 320 días de sol al año y la convierte en la elección ideal para aficionados y profesionales que desean disfrutar del golf en cualquier temporada. Además, la provincia de Málaga tiene una historia ligada al golf desde la fundación en 1925 del que fuese el primer campo de golf de toda Andalucía, el Real Club de Campo, hoy conocido como Parador de Golf de Málaga. La afición al golf no ha dejado de crecer desde entonces, lo que también significó el aumento en la oferta de áreas destinadas a la práctica de este deporte. No obstante, no fue hasta los años 60 cuando verdaderamente comenzó la explosión de los clubes.
Hoy en día, la denominada Costa del Golf posee la mayor concentración de campos de golf de España y de Europa, con más de 70 altamente competitivos, diseñados por arquitectos de renombre como Robert Trent Jones, Tom Simpson, Michael Campbell, Peter Gustafsson o Cabell Robinson, que han contribuido a la reputación del golf en la zona. Todos ellos han dejado su huella en la Costa del Sol en diseños reconocidos mundialmente y que han sido sede de eventos globales como la Ryder Cup de 1997 y la Solheim Cup de 2023.
Además de sus campos de golf, la Costa del Sol ofrece una amplia gama de actividades culturales y de ocio. Los golfistas pueden explorar los 103 municipios, visitar museos, pasear por las animadas calles de las ciudades y sumergirse en la rica cultura local.
La gastronomía es otro punto destacado de la provincia de Málaga, con diez Estrellas Michelín, bares de tapas, restaurantes de alta cocina y bodegas de renombre. Estos atractivos, junto con el ambiente deportivo, convierten a la Costa del Sol en el destino perfecto para los amantes del golf y aquellos que deseen iniciarse en este apasionante deporte.