La Cabane celebra este verano sus 60 años de historia. Seis décadas en las que este emblemático beach club ha sido mucho más que un espacio junto al mar: un auténtico referente social, cultural y gastronómico de la Costa del Sol.
Desde sus inicios en los años 60, La Cabane se convirtió en el refugio predilecto de la jet set internacional y la aristocracia europea, un lugar donde los veranos se vivían con sofisticación y donde cada detalle respiraba elegancia.
Hoy, La Cabane sigue fiel a ese legado. Desde hace tres años, forma parte de la alianza entre el Grupo Mosh y el Grupo Dani García, un tándem que ha sabido potenciar su propuesta gastronómica sin perder la esencia relajada y distinguida que la ha acompañado a lo largo de seis décadas. Este equilibrio entre tradición y renovación ha consolidado a La Cabane como uno de los lugares imprescindibles de Marbella.
Un verano con acento italiano: Dolce & Gabbana regresa a La Cabane
Este verano, además, La Cabane celebra por partida doble. A sus seis décadas de trayectoria se suma una nueva edición del creative takeover de Dolce & Gabbana, que regresa con su propuesta inmersiva DG Resort para llenar el espacio de color, estilo y sabor mediterráneo.
El icónico beach club vuelve a vestirse con la estética Blu Mediterraneo de la firma italiana, que este año no solo decora la piscina y la terraza frente al mar, sino que también transforma el salón interior del restaurante. El blanco luminoso y el azul intenso, inspirados en las tradicionales cerámicas del sur de Italia, inundan cada rincón, transportando a los visitantes a la esencia más pura de la costa italiana.
La experiencia se completa con la pop-up store situada en la zona de recepción, donde se exhibe una cuidada selección de prendas, accesorios y piezas de la colección Dolce & Gabbana Casa, todo bajo la premisa de unir tradición artesanal y diseño contemporáneo.
La propuesta gastronómica, liderada por el chef Dani García, incorpora también un toque de fantasía con la exclusiva Dolci Room: un espacio inspirado en los coloridos carritos sicilianos, donde el postre se convierte en un momento inolvidable entre sabores dulces y guiños folclóricos a la isla italiana.
Con esta alianza de estilo y gastronomía, La Cabane reafirma su posición como epicentro del verano marbellí, un lugar donde el tiempo parece detenerse para disfrutar, sin prisas, de la buena vida.