Jason Dufner, quien lleva una temporada de grandes cambios y dos victorias consecutivas, acabó pagando su osadía en el hoyo 15 de El Colonial, donde firmó un triple bogey, y dio la oportunidad a Zach Johnson en el Crowne Plaza Invitational.
Dufner trataba de salir del bunker para encaminar su bola hacia el hoyo, pero aunque estuvo muy cerca de conseguirlo, su bola fue a parar al agua. En otra situación, esa bola con un poco de retroceso estaría dentro y tal vez el titular sería otro. Quizás demasiada fuerza, quizás exceso de confianza… se puede catalogar como una osadía, un error, o simplemente un despiste. Al igual que lo acontecido en el 18 con Zach Johnson, que olvidó reponer el marcador en su posición en el green para el putt de Dufner. Los nervios ya habían hecho acto de presencia en el tee del 18, donde Johnson se saltó el orden de salida. Le podía haber costado caro su despiste en el green, pero durante la celebración con su caddy este le preguntaba por el reposicionado. Suerte que no entregaran la tarjeta sin recordarlo. Aún sancionado con dos golpes, se hacía con su octava victoria en el PGA Tour y ganaba por un solo golpe al embocar su putt de unos 2 metros, lo que supone el tercer puesto de la FedEx Cup, detrás de Hunter Mahan y Jason Dufner.
Anecdóticamente, fue en este mismo torneo en el que Zach Johson obtuvo su último título en 2010 donde se enfundó el tartán del ganador.