Por segunda vez en su carrera profesional el Dubai Desert Classic disputado en el Club de Golf Emirates recae en las manos de Rory McIlroy. La primera vez que levantaba este trofeo, era su primera victoria en el European Tour con tan solo 19 años.
El norirlandés, número uno del mundo, dio un golpe de mando en la segunda jornada con una tarjeta 64 golpes (-8), para apoderarse de un liderato que no abandonaría en ningún momento, cerrando con un total de 22 bajo par, igualando el récord del Dubai Desert Classic establecido por Thomas Bjørn en 2001 e igualado en 2013 por Stephen Gallacher.
McIlroy lleva una racha imparable en el European Tour. Ha ganado cuatro de sus últimas siete intervenciones en el circuito europeo, quedando segundo en sus otras tres intervenciones.
«Últimamente solo conseguía quedar segundo, así que ya era hora de hacerlo mejor. Por fin lo he conseguido y estoy encantado de volver a poner mi nombre en este trofeo.Creo que he jugado muy bien toda la semana y hoy he hecho lo que tenía que hacer. No he jugado tan bien como los tres primeros días pero he conseguido mantener las distancias».
Charl Schwartzel y Martin Kaymer, los jugadores destacados más próximos al liderato de McIlroy no comenzarían con buen pié su ataque al norirlandés, que aseguraba se encontraba algo inseguro al inicio de la última jornada.
«Me sentía un poco inseguro en los primeros hoyos. Ya hemos visto tirar ventajas muy importantes las últimas semanas y empecé demasiado conservador».
Lee Westwood también lanzaría un sólido ataque con tres birdies en los cinco primeros para ponerse a cuatro golpes del líder pero, por segundo día consecutivo, su bola se fue al agua en el 9 y le costó un doble bogey.
Con la caída del inglés, nadie amenazaba la victoria de Rory McIlroy, que cerraría con cinco pares cogiendo las calles y greenes en la recta final.
Alex Noren terminaba segundo a tres golpes con -19 gracias a un impecable 65 final. El sueco, que lleva de baja casi todo el 2014 por tendinitis en ambas muñecas, vuelve a los puestos de cabeza con su mejor resultado desde 2011.
Álvaro Quirós ha sido el protagonista español del Dubai Desert Classic en la jornada final con el único hoyo en uno del torneo, cerca de igualar la mejor vuelta del día, con 64 golpes, entre ellos un extraordinario eagle y seis birdies más, que lo situaban en el Top 20, empatado con Pablo Larrazábal con -12.
«Mi compañero Anthony Wall pegó un buen golpe, picó a un metro y solo podíamos ver su pique. Tenía unos 150 metros y pegué ¾ de hierro 8 directo a la bandera, picó y desapareció. No sabíamos si estaba en el bunker de atrás porque teníamos el sol de cara, pero estaba en el hoyo.
No había nadie para verlo, era demasiado temprano. Eso pasa cuando juegas mal los tres primeros días, que no hay nadie para aplaudir.
No se hace hoyo en uno todos los días, y en mi caso viene acompañado de una vuelta de 64 que es lo más importante. Es la segunda vuelta consecutiva que hago sin bogeys, y eso es una buena noticia.
Hay muchas cosas que mejorar, sobre todo mentalmente. Tengo que conseguir un poco más de confianza en mi juego, que realmente no está tan mal, pero es difícil cuando los resultados no llegan. Creo que esta vuelta ha sido un paso en la buena dirección.»