Nunca el nombre de este apartado ha estado tan ligado a un país. Y es que China es el origen del golf. Según el historiador Ling Hongling de la Universidad de Lanzhou, lo que en la actualidad conocemos como golf tuvo sus orígenes en un juego llamado ¨chuiwan¨, formado por las palabra chui (bola) y wan (golpear). Su primera referencia bibliográfica data de la Dinastia Song ( 960-1279).
El golf en el Lejano Oriente era una actividad física practicada en todas las clases sociales, desde pastores hasta emperadores, copiada por los mongoles y llevada a Occidente durante sus conquistas. Los Mongoles llegaron prácticamente hasta las puertas de Roma, y allí los romanos recogieron el testigo y lo exportaron hasta las Galias e islas del norte de Europa. No fue hasta casi dos siglos más tarde cuando los escoceses basándose en las divisiones, chupitos, de una botella de whisky (18) reglaron el deporte como lo conocemos en la actualidad.
El juego no ha variado en su concepción, golpear una piedra con un palo de un lugar a otro y ganando el jugador que menos golpes emplea en ello.
Y así, llegamos al siglo XXI! En la actualidad practican golf en China más de un millón de personas, doblando cifras de practicantes año a año. Fenómenos como, la inclusión del golf en el programa de los Juegos Olímpicos y su poder mediático, golf como status social, hacen que este fenómeno no pare de crecer.
El golf como actividad aristocrática fue perseguido y castigado por el régimen comunista chino, en 1984 tan solo existía un campo de golf en Pekín. En la actualidad tan solo en la capital china existen 70 y algo más de 600 en todo el país. Los grandes focos de esta industria se centran en Pekín, Shenzhen y la isla de Hainan.
El rápido crecimiento de la clase media china y el seguimiento en cuanto a medios de comunicación, revistas y periódicos y televisiones le auguran un gran potencial. El pasado mes de octubre siguieron por televisión 39,7 millones de personas la victoria de Fernández-Castaño en Shanghai.
La industria turística en China en torno al mundo del golf es muy joven, no se viaja para jugar al golf sino que se aprovechan las visitas para jugar algunos hoyos. En España disponemos de un gran potencial de instalaciones y servicios, además de algunos de los mejores campos europeos pero los chinos aún nos ven como destino cultural y no golfístico. Creo entender y conocer al jugador chino porque he tenido la oportunidad de jugar con ellos en Barcelona, Madrid y Andalucía, en mi trabajo de acompañar a los grupos desde China a España.
Existen fuertes condicionantes, uno de ellos es que en China no existe una federación u órgano regulador, no existe un sistema de handicap, los campos son ¨pay and play¨ y en España exigen tener o pagar una licencia. Podría contaros mis batallas con las recepcionistas de los campos españoles para reservar greenfees incluso con el beneplácito de los gerentes.
Además de conocer las exigencias de los asiáticos como turistas, lamentablemente en este sentido decir que, estamos a mucha distancia de países que no tienen excesiva tradición golfística pero que nos ganan por la mano como son Francia, Italia, Nueva Zelanda o Estados Unidos.
Con la aparición en 2014 del nuevo circuito PGA China Tour, con doce pruebas repartidas a lo largo y ancho del país y que otorga 200.000 $ al ganador de cada prueba, empezaremos a reconocer los jugadores chinos.
