Después de 5 años como director de Los Naranjos GC, que se cumplen ahora, habrás tenido muchos momentos buenos y otros no tanto. Me gustaría saber ¿Cuál ha sido en tu opinión el momento mas complicado y el mas reconfortante?
Han sido muchos los retos que hemos logrado en los últimos años en Los Naranjos GC. A nivel personal destacaría la superación de las crisis de diferente índole que hemos vivido. Dar respuesta a una ocupación ilegal de un restaurante durante más de 3 meses, recuperar el campo tras dos inundaciones que lo destrozaron y la recuperación económica tras la reciente pandemia, son sin duda los momentos mas complejos que he tenido que vivir. Mirándolo con perspectiva creo que me han hecho un mejor gestor de recursos y de personas.
De todos ellos hemos salido reforzados y han traído posteriormente acontecimientos muy positivos. Estos retos han demandado una estrategia cambiante acorde a las necesidades y un gran sentido de la adaptabilidad. Apartando las situaciones extraordinarias como las anteriormente mencionadas, lo verdaderamente complicado de mi posición es presentar una visión y estrategia de futuro para el crecimiento del club y alinear en esa visión a propiedad, personal, proveedores, patrocinadores y socios para poder llevarlas a cabo. Presentar y convencer a un gran número de personas es siempre un reto y conlleva muchas horas de esfuerzo, dedicación y convicción.
No creo que haya un momento en particular mas reconfortante que otro, pero sí es profundamente satisfactorio la materialización de los diferentes retos a conseguir dentro de la visión, que resultan, entre otras cosas, en múltiples oportunidades de negocio para el club que hace 5 años eran impensables. Ser internacionalmente reconocido por un servicio de excelencia frente a otros clubs, ser sede de un evento del Circuito Europeo Femenino, el grandísimo crecimiento de varios de nuestros torneos, como el Trophy o el Open, mejorar sustancialmente el mantenimiento del campo, recibir mensajes de felicitación de nuestros clientes y socios y ver al personal adquirir nuevas competencias y responsabilidades, son siempre motivo de satisfacción. Soy alguien con dificultades para mirar hacia atrás y por ello pienso, que lo mejor siempre está por venir.