Ganar un primer título del circuito europeo en la vida de un jugador profesional debe ser una satisfacción increíble. Más aún, si has intentado en 255 ocasiones conseguirlo. La tenacidad de Jamie Donaldson ha tenido su recompensa en un campo único como es el Royal Portrush donde el galés ha disputado y ganado el Irish Open, el primer torneo en la historia del European Tour que cuelga el cartel de «no hay entradas» con más de 100.000 personas en el cómputo total de asistencia.
La jornada final se disputó durante un día tranquilo y apacible, donde las anotaciones bajas se reflejaron en las tarjetas de la gran mayoría de jugadores.
Los locales apoyaban a los suyos, McIlroy y McDowell, esperando una remontada de ambos, algo habitual en la carrera de ambos jugadores, pero el ritmo fue impuesto desde la primera vuelta por Donaldson, que comenzaba con 3 birdies consecutivos, y seguido muy de cerca por un Rafa Cabrera Bello que ha destapado el tarro de las esencias esta temporada. El español se situó muy cerca en el marcador tras dos birdies consecutivos en el 15 y 16, pero un error en el 17 dio alas a Donaldson, que sin dar opciones, cerró con cuatro birdies en los últimos cinco hoyos, dos de ellos en el 17 y el 18.
Cabrera Bello se repuso del error en el 17 con un excelente birdie en el 18, y obtenía una segunda posición compartida con Anthony Wall y Fabrizio Zanotti, que le vale entrar en el top 50 mundial y situarse en décimo lugar en la lista de puntos para la Ryder Cup.