Hace quince años que José María Olazábal se enfundó la chaqueta verde en su victoria del Masters de Augusta de 1999. En esta edición el propio Olazábal, Sergio García, Miguel Ángel Jiménez y Gonzalo Fernández-Castaño vuelven al National para romper esta prolongada espera de volver a ver a un español ganando un major que también se le resiste a los europeos.
Sergio García es el que más posibilidades tiene para hacerse con el triunfo entre el cuarteto español. Llega en un buen momento de forma, tercero en el Shell Houston Open, tras ser durante las dos primeras jornadas líder en la clasificación. Tampoco podemos olvidar su victoria en Qatar a comienzos de 2014 y la obtenida en Tailandia a finales de 2013. Haciendo un poco de memoria en la carrera del castellonense, podemos observar que ha estado en 18 ocasiones en el top 10 de algún major, siendo su mejor puesto en el Masters de Augusta un cuarto puesto. En esta ocasión, y visto los últimos torneos disputados por el de Borriol, todo parece más estable, más consistente. Ha vuelto a encontrar su juego corto y tener mejor relación con su putter, que tantos problemas dio en el pasado.
Augusta National no es un campo del agrado de Sergio García, pero en esta ocasión, podemos ser más optimistas que en ediciones anteriores, visto el nivel en el que llega el español.
Gonzalo Fernández-Castaño es también unas de las bazas españolas a tener en cuenta. En la edición de 2013, Gonzalo rindió a un gran nivel en el Masters y supo estar entre los diez primeros del US Open. Al contrario que a García, le encanta el recorrido norteamericano y esto puede ser un aliciente en la superación personal hacia la victoria del campeonato de la chaqueta verde.
El malagueño Miguel Ángel Jiménez tampoco puede ser obviado en las opciones por la victoria. A la experiencia se le suma la actitud positiva y un estado de forma mantenido en los últimos años. Potencia, flexibilidad y actitud son las armas del capitán europeo de la reciente Eurasia Cup, donde mostró altibajos en el juego. Pero con Jiménez no se puede dar por sentado nada.
José María Olazábal no está pasando por su mejor forma física y nivel de juego, pero al igual que su amigo, y mano derecha en la Ryder Cup, Miguel Ángel Jiménez, suma sobrada experiencia, además de ser el único de los cuatro que tiene en su haber la preciada chaqueta verde.