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Jon Rahm logró lo que parecía una quimera sólo 24 horas antes, remontar siete golpes a Collin Morikawa, el líder que dominaba con mano de hierro el Sentry Tournament of Champions, torneo que reunió en Hawai a los 39 ganadores del año anterior y con el que se ha dado el pistoletazo de salida al PGA Tour de 2023.
El jugador vasco nunca se dio por vencido y supo aprovechar la discreta –e inesperada- tarjeta del estadounidense (72 golpes, -1), pero para ello, tuvo que destapar el tarro de las esencias y firmar nada más y nada menos que nueve birdies y un eagle, pero también un bogey, para demostrar que también es humano.
Y es que ese error, el único del día de Jon Rahm, lo cometió en el primer hoyo del recorrido. Nada hacía presagiar lo que vendría después, pero con el golfista de Barrika en el campo todo puede pasar… y pasó.
El vizcaíno cinceló una magnífica vuelta de 63 golpes (-10), para un total de 265 golpes (-27), dos menos que un Collin Morikawa que se tuvo que conformar con el segundo puesto, mientras que los estadounidenses Tom Hoge y Max Homa se encargaron de completar del podio.
Campeón de campeones
Jon Rahm empezó su primera ronda de la temporada 2023 de la mejor forma posible, con su primer birdie en su primer hoyo, el 10 del recorrido de Kapalua, y luego sumó siete más, poniendo la guinda a su vuelta con un eagle en el hoyo 5 para un resultado de 64 golpes (-9).
En la segunda jornada, el jugador de 28 años no estuvo tan inspirado y concluyó con una tarjeta de 71 golpes (-1), de la que se repuso al día siguiente con una vuelta de 67 golpes (-6), justo antes de dar el zarpazo definitivo para alzarse con su primera victoria de la temporada.
Especialmente dolorosa fue la de hace doce meses, cuando el jugador español concluyó con 33 bajo par, un resultado estratosférico que, por primera vez en la historia, no contó con el premio de la victoria toda vez que el australiano Cameron Smith se llevó el título en juego al acumular por su parte 34 bajo par tras protagonizar ambos un duelo espectacular.
En esta ocasión le ha bastado con firmar 27 bajo par para lograr el que es su octavo trofeo del PGA Tour que lleva a sus vitrinas, en las que reluce especialmente el US Open de 2021, su primer y, hasta el momento, único grande.