Poco ha durado el reinado de Rory McIlroy. Tras dos semanas como número uno tras imponerse en el Honda Classic demostrando un juego excepcional y una tenacidad prodigiosa, ha tenido que devolver la «corona» a Luke Donald al alcanzar la victoria en el Transitions Championship disputado en Innisbrook.
Luke, que comenzaba la temporada de forma irregular, ha dado un golpe sobre la mesa y ha demostrado porqué fue número uno mundial durante 40 semanas: un swing soberbio y un juego corto muy sólido. Si bien es cierto que al inglés no tuvo todas las facilidades para alzarse con el trofeo de este campeonato, ya que tuvo que disputar un play off, el primero en la historia del Transitions Championship, e imponerse a Furyk, que tuvo el torneo a su alcance pero que se le escapó de entre los dedos al errar en un putt de 8 metros en el hoyo final antes del desempate, Garrigus y Sang-moon Bae en el primer hoyo del desempate.
Sergio García tuvo una actuación bastante meritoria sobre el césped de Copperhead. Bajo par en las cuatro jornadas y con -8 en el acumulado, obtuvo la decimosexta plaza.
Entre los damnificados del torneo, los veteranos sudafricanos Ernie Els y Retief Goosen, que no podrán disputar el Masters de Augusta a pesar de haber estando tan cerca de conseguirlo. Els quedó fuera del play off por sus fallos con el putter y Goosen que comenzó con buen pié vio como los fuertes dolores de espalda que sufría le pasaban factura en la última ronda y caía hasta la vigésima plaza.